Una de las técnicas más novedosas que existen actualmente en los centros de estética, relax, spas y centros de belleza es la vinoterapia. Esta técnica cuenta con muchísimos beneficios a nivel de salud y estéticos. A continuación te contamos en qué consiste la vinoterapia, sus principales beneficios y todo lo que debes conocer sobre la vinoterapia, de la mano de los mejores expertos.
La vinoterapia para sanar cuerpo y mente
Esta técnica permite mejorar en gran medida la piel gracias a las positivas propiedades de la uva y del vino, que se incorporan de manera eficiente en distintos tipos de tratamiento.
Asimismo, el vino y el enoturismo cuentan con muchos aficionados que no se conforman con disfrutar de este delicioso producto únicamente a nivel de consumo y gastronómico, sino que buscan alternativas diferentes para disfrutar de todas las posibilidades que esta deliciosa bebida nos ofrece. Así, además de los viajes de enoturismo y de las catas de vinos, encontramos la vinoterapia. Sigue leyendo para conocer qué es la vinoterapia y sus principales beneficios para cuidar cuerpo y mente.
Qué es la vinoterapia
Lo primero que debemos saber antes de adentrarnos más en las propiedades y los beneficios de la vinoterapia es qué es concretamente la vinoterapia. Se trata de una técnica que se basa en aprovechar al máximo todas las propiedades y beneficios de la uva y del vino para mejorar el estado de nuestra piel y de nuestro cuerpo a nivel general.
La vinoterapia se aplica en sesiones terapéuticas en las que se usa el vino y sus diferentes componentes. En la vinoterapia se aprovechan la uva, sus pepitas, la pulpa y los hollejos de la uva. De esta manera, se busca lograr un beneficio total del cuerpo y de la mente mediante tratamientos naturales y realmente saludables.
Asimismo, las sesiones de vinoterapia se preparan en centros especializados y en spas, tal y como nos han explicado los expertos en cuidados de belleza consultados de PacoPerfumerías, en los que trabajan los profesionales que conocen muy bien todas sus propiedades y la manera de aprovechar a la perfección todos los componentes del vino dependiendo de las necesidades concretas de cada individuo.
La vinoterapia: sus orígenes
Por sorprendente que nos parezca, la vinoterapia no es un tipo de tratamiento novedoso, ni en España ni en ninguna otra parte del mundo, si bien ha ido cambiando con el paso del tiempo para optimizar su uso y maximizar sus beneficios.
En Francia el Rey Luis XV puso de moda la vinoterapia en la corte. En aquellos tiempos se utilizaban las mascarillas de vino para realzar la belleza de las mujeres y realzar el color rosa de las mejillas.
Del mismo modo, desde la antigüedad el vino se encargaba de acompañar los mejores momentos de diversión y de fiesta, aunque también se usaban como forma de sanación en los rituales de salud y de curación. De esta manera, muchos autores clásicos como el famoso Hipócrates destacaban las propiedades curativas y terapéuticas del vino.
De esta forma, la vinoterapia tal y como la conocemos en la actualidad, aunque con algunas diferencias, nace en uno de los países con más tradición de vinos del mundo como es Francia. Concretamente la vinoterapia nace en la región francesa de Graves, mundialmente conocida por albergar bodegas y viñedos realmente antiguos. Desde Francia la vinoterapia se ha ido extendiendo por diferentes países con mucha tradición vinícola, como España, dónde actualmente podemos encontrar muchos spas y centros de belleza en los que se utilizan este tipo de terapias.
Del mismo modo, el concepto moderno de vinoterapia tal y como lo conocemos en la actualidad aparece a final del siglo XX con Bertrand Thomas y Matilde Cathiard, quienes fueron dos amantes y estudiosos del vino que se decidieron a crear el primer centro de vinoterapia del mundo en Burdeos. Fueron los pioneros en aprovechar todos los componentes del vino además de la uva, como sus pepitas o las semillas, para incluirlos en todos sus tratamientos. En el año 1995 estos expertos lanzaron incluso una gama de productos cosméticos elaborados con productos derivados de la uva, ideales para cuidar la piel.
Propiedades de las uvas
La vinoterapia no aprovecha únicamente el vino para mejorar la piel y la salud a nivel general, sino que aprovecha todos los beneficios de sus componentes, incluyendo las uvas y todas sus partes. De esta manera, la uva es una fruta especialmente saludable con una composición que la convierte en la opción ideal para la realización de tratamientos faciales y corporales.
Las uvas tienen vitaminas, minerales y ácidos esenciales que hacen que sea la fruta ideal para cuidar nuestro sistema cardiovascular y nuestro organismo. Del mismo modo, las uvas no contienen calorías ni grasas, así como cuentan con pocas proteínas. De esta manera, se digieren con rapidez y es una fruta que el organismo absorbe muy bien, siendo por tanto la alternativa ideal para usar en vinoterapia.
Las uvas permiten prevenir enfermedades cardiovascular y ayudan a eliminar los problemas de estómago. A nivel facial mejoran el estado del cutis y permiten eliminar el acné. También reducen el colesterol y la presión sanguínea porque son cardio protectoras.
Del mismo modo, están muy recomendadas durante el embarazo, combaten el estreñimiento y nos protegen contra el cáncer de mama o de colon. Finalmente, son grandes aliadas para prevenir el envejecimiento gracias a sus propiedades antioxidantes y nos ayudarán a cuidar y mantener nuestra memoria en su mejor estado durante muchos años.
Beneficios del vino para la piel
Además de ser antioxidante, el vino aporta muchos beneficios a la piel que reseñamos a continuación. En primer lugar, el vino permite mantener una piel tonificada y muy tersa.
Del mismo modo, también nos ayudará a mejorar nuestra circulación y nuestro sistema cardiovascular, así como a regenerar y desintoxicar la piel. El vino también neutraliza los radicales libres, que son responsables del envejecimiento prematuro de la piel.
Entre sus principales propiedades encontramos que también es ideal para aliviar los dolores que sufren las personas que padecen de calambres musculares. El vino también mejora el estado de las varices y reduce el riesgo de padecer problemas de hemorroides. Además, el vino permite reducir la tensión arterial, puede ayudarnos a aumentar nuestras defensas y desintoxica la piel del exceso de sol, del tabaco, del estrés de la polución y de otros agentes externos.
Beneficios de la vinoterapia para cuidar la salud
De esta manera, todos los beneficios del vino y de sus componentes se aprovechan completamente en la vinoterapia. A continuación te contamos todos los beneficios que la vinoterapia aporta a nuestra salud.
En primer lugar, la vinoterapia permite hidratar la piel a la perfección, aportándonos energía y luminosidad y mejoran la firmeza y elasticidad de nuestra piel.
Del mismo modo, las pieles apagadas y envejecidas también pueden beneficiarse en gran medida del uso de la vinoterapia. Por otro lado, la vinoterapia nos permite mejorar la circulación, las varices y las piernas cansadas, siendo por tanto ideal para aplicarla también en diferentes tratamientos corporales.
Por otro lado, la vinoterapia, con las propiedades de la uva, también es interesante para frenar el envejecimiento provocado por los radicales libres, ya que cuenta con un potente poder antioxidante.
Del mismo modo, también sirve para relajar y liberar tensiones, tanto a nivel mental como a nivel corporal. Los tratamientos de vinoterapia se celebran en spas y en centros de belleza, siendo los más interesantes los baños termales en bañeras de hidromasaje con vino, los masajes corporales a base de aceites elaborados con las uvas y sus pepitas, las envolturas de sudación con extractos de uvas, arcilla o aceites de semillas de uva y los peelings faciales y exfoliantes realizados a base de semillas de uvas.
Qué uvas se utilizan para la vinoterapia
En la vinoterapia existen algunos vinos que son especialmente interesantes para tratar diversos problemas. Los Rioja se usan para elaborar cosméticos, los lambruscos para los tratamientos de la piel gracias a sus propiedades minerales y los Malvec para elaborar jabones y fragancias.
Del mismo modo, el Chianti es muy relajante y se usa para realizar masajes corporales, el Merlot y el Carbernet sirven para hacer exfoliantes y peelings y eliminar las células muertas y el champagne se utiliza a nivel general en vinoterapia, aplicándose en todo tipo de tratamientos.